jueves, 29 de diciembre de 2011

LA ORACIÓN DE INTERCESIÓN DE PABLO A LOS COLOSENSES


LA ORACIÓN DE INTERCESIÓN

Col 1: 1-12
1.        Pablo, apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y el hermano Timoteo,
2.        a los santos y fieles hermanos en Cristo que están en Colosas: Gracia y paz sean a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
3.        Siempre orando por vosotros, damos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo,
4.        habiendo oído de vuestra fe en Cristo Jesús, y del amor que tenéis a todos los santos,
5.        a causa de la esperanza que os está guardada en los cielos, de la cual ya habéis oído por la palabra verdadera del evangelio,
6.        que ha llegado hasta vosotros, así como a todo el mundo, y lleva fruto y crece también en vosotros, desde el día que oísteis y conocisteis la gracia de Dios en verdad,
7.        como lo habéis aprendido de Epafras, nuestro consiervo amado, que es un fiel ministro de Cristo para vosotros,
8.        quien también nos ha declarado vuestro amor en el Espíritu.

Col 1:9-12
9.        Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis (1)llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual
10.     para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios;
11.     fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad;  
12.     con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz;


LA ORACIÓN DE PABLO
Este estudio se trata de reflexionar en la oración en que el apóstol Pablo pide al Señor por los cristianos de Colosas, y que menciona en el primer capítulo de la carta escrita a los colosenses.
En esta carta, Pablo, luego de presentarse junto a su discípulo Timoteo a los santos de Colosas, les saluda deseándoles la gracia y la paz de Dios padre y de Jesucristo. A seguidas les dice como ora siempre por ellos en acción de gracias y les señala 5 razones para dar gracias a Dios por ellos, que son: Por su
(1)Por su fe en Cristo Jesús,
(2)Por el amor que tenéis a todos los santos,
(3) Por la esperanza que os está guardada en los cielos,
(4) Por llevar fruto
5) El cual crece también en vosotros, desde el día que oísteis y conocisteis la gracia de Dios en verdad,
El apóstol no había visitado Colosas cuando escribió esta carta, pero dice en el ver 7 que esto lo habían aprendido de Epafras, fundador de la iglesia de Colosas y que este le había informado a su regreso, sobre la forma en que vivían estos hermanos

(Pablo dirige la carta a los santos y hermanos en vez de a las iglesias como era su costumbre)

En estos versículos que acabamos de leer, el apóstol Pablo pide al Señor, las cosas que considera importantes para que sean manifiestas en los hermanos de Colosas,  que son las mismas que necesita desarrollar todo creyente. 

Cuando el apóstol Pablo les dice que ora por ellos “desde el día que lo oímos” se refiere al momento en que se entera por Epafras, de la fe y el amor que caracterizaba a estos hermanos. Sabía por lo que le había contado este discípulo suyo, los frutos que estaban produciendo los hermanos colosenses.

Pablo les dice “no cesamos de orar por vosotros”. Pablo ora sin cesar y sus peticiones son hechas por cosas espirituales, intercede ante Dios por cosas que no perecen.

La oración intercesora es el acto de orar y pedir en favor de otros.  Cristo es señalado en el Nuevo Testamento como el intercesor entre Dios y los hombres y es por ello que toda la oración cristiana se convierte en intercesora, puesto que es ofrecida a Dios por y a través de Cristo.

Jesús cerró la brecha que había entre Dios y nosotros cuando Él murió en la cruz. Es el más grande mediador (intercesor) que haya existido, ya que media directamente ante Dios Padre. “Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.” (1 Timoteo 2:5). “¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.” (Romanos 8:34).



 Podemos reflexionar sobre cada petición hecha por el apóstol Pablo y hacer de ella un modelo de rogativa ante el Señor, intercediendo por nuestros hermanos y por la congregación. 

En la misma carta, el apóstol también urgía a los colosenses a interceder por él: “Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias; orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso.” (Colosenses 4:2-3).

Pablo comienza diciendo a los hermanos que él ruega por:
1) Ver 9b Que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual,
Es la misma petición que hace al Padre por los Efesios, en  Ef 1:17para que el Dios de nuestro señor Jesucristo, el Padre de Gloria, os de espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de El.
Y qué nos dice la Biblia sobre lo que significa “el conocimiento de Su voluntad, en toda sabiduría e inteligencia espiritual”?
El apóstol Santiago nos dice en su epístola, refiriéndose a la sabiduría, aquello que ha de hacer el cristiano para ponerla en evidencia :
Stgo. 3:13  ¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta sus obras en sabia mansedumbre.
Y más adelante continúa diciéndonos, cómo es la sabiduría de Dios;
Stgo 3:17, Pero la sabiduría que es de lo alto, es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía.

En Rom 12:2, les dice a los creyentes romanos: No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento para que comprobéis cual sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Así que sólo transformando nuestras mentes y nuestro entendimiento al abandonar nuestra vieja manera de pensar, es que podemos comprobar la voluntad de Dios para nuestras vidas.

Contamos además, con otras epístolas donde el apóstol Pablo se refiere a estos mismos conceptos, exhortándonos a crecer en el conocimiento de Dios que es Cristo Jesús …..Creciendo en el conocimiento de Dios
En Ef 4:15 dice…. sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo, en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo

Donde ruega a Dios por los tesalonicenses en 1Tes 3:12, diciendo:….. y el Señor os haga crecer y abundar en amor unos para con otros y para con todos, como también lo hacemos nosotros para con vosotros,

Y consecuentemente surge la pregunta, ¿cómo podemos llenarnos del conocimiento de su voluntad? Pregunta que amerita  veamos lo que nos dice la Palabra de Dios sobre cuál es la Voluntad de Dios;
En Juan 7:17 nos dice refiriéndose a Su Voluntad, “está en La Palabra y en la Doctrina de Dios”  y nos dice que Su voluntad la habremos de “conocer espiritualmente”,
Juan 7:17 lee “El que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios o si yo hablo por mi propia cuenta”
El apóstol Pedro en 1Ped 2:15 es muy categórico cuando dice… porque esta es la voluntad de Dios, que haciendo bien, hagáis callar la ignorancia de los hombres insensatos.

En Efesios, el apóstol Pablo trata de ser mucho más explícito, refiriéndose a la voluntad de Dios y dice que debemos conocerla en toda su medida a los fines de que podamos ser llenos de la Plenitud de Dios y aclara que no es para algunos creyentes sino para todos los santos del Señor.
Veamos Ef 3:18-19; donde en el versículo 18 dice- Seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos, cual sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura,
Siguiendo en el verso 19, con la aseveración de que el gran amor de Cristo es algo difícil de entender por la mente humana que no está guiada por el Espíritu Santo   19- y de conocer el amor de Cristo que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.

En la 1ra carta a los Corintios el mismo apóstol Pablo nos habla de la incapacidad de recibir, es decir, de comprender doctrina más sólida, la más profunda verdad del Evangelio, a causa de nuestra inmadurez en el conocimiento y nuestro escaso crecimiento en el Señor y así lo expresa en  1ra Cor 3:1de manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo.
Recalcando el autor de Hebreos en He 5:14… Pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso, tienen sus sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.

Pero, hemos pensado en para qué debemos llenarnos del conocimiento y de la sabiduría de Dios? Qué significa el discernimiento del bien y el mal?

En la misma oración por los Colosenses Pablo nos expone las razones por las que hace esta petición diciéndonos en el versículo 10 que:

10.  para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios;

“Para que andéis como es digno del Señor” ..Como podemos andar como es digno del señor??
Andar Conforme al Espíritu
Todas las respuestas las encontramos en la misma Biblia, de modo que Gal 5:25 dice.. Si vivimos por el espíritu, andemos también por el Espíritu
Andemos una vida nueva…
En Rom 6:4b se nos señala la forma cómo debemos andar los cristianos,.. “Así también nosotros andemos en vida nueva., andando en el espíritu, no satisfaciendo los deseos de la carne”   

Esta sabiduría de lo alto que también podemos llamar discernimiento de lo alto, nos permite identificar, apartarnos y reprender el pecado, que puede presentarse a nosotros como un regalo o una dádiva,  pero que realmente no viene de Dios sino que puede venir del maligno. El discernimiento nos permite distinguir lo que preferimos de lo que debemos hacer. De ésta, es la única forma que podremos vivir en el mundo sin ser parte del mundo, distinguiendo lo que perece de lo que no perece.

El mismo apóstol Pablo nos dice en Rom 8:1 que “los creyentes no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu”, como también se lo enseña a los gálatas en
Gal 5:16  donde les dice la forma como deben vivir…Digo, pues: Andad en el Espíritu y no satisfagáis los deseos de la carne.

Pero continua abundando y siendo más explícito sobre nuestra forma de vida como cristianos y agrega: agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra.
          La misma Biblia nos expresa la forma de agradar a nuestro Dios. En Rom 8:8 dice y   los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.   El autor de Hebreos es claro cuando nos habla de hacer el bien y ayudarnos mutuamente como “de los sacrificios que agradan al Señor” Heb 13:15-16 Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre. 16 Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios. 

Heb 13: 20-21 Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno, 21 os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo; al cual sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.  De modo que el cristiano agradará a Dios por la misma obra divina, El nos hace aptos y es El quien hace en nosotros lo que le agrada y todo mediante Jesucristo. Por esto podemos inferir que existe una estrecha relación entre lo que a Dios le agrada en nosotros y su propia obra en cada cristiano. Evidentemente todo habrá de depender de nuestra sujeción a Jesús y a nuestro Padre Dios.
Consecuentemente el apóstol Pablo aclara que la forma en que le agradamos en todo es… llevando fruto en toda buena obra.

Y a qué se refiere el apóstol con llevar frutos? Por supuesto que hablamos de frutos espirituales, que habrán de ser el resultado de la madurez espiritual, del crecimiento espiritual y que son los frutos de la obra del Espíritu Santo en nosotros. El Espíritu es el que nos enseña y el que produce en nosotros sus frutos, nos abastece de atributos que habrán de manifestarse en buenas obras para con los demás, hermanos o no, todos habrán de ser impactados por esos frutos espirituales.

En Ef 5:9-11 porque el fruto del Espíritu es en toda bondad, justicia y verdad, 10 comprobando lo que es agradable al Señor. 11 Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas;
En Gal 5: 22-23 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley..

Regresando a la oración de intercesión de Pablo, éste nos dice en el Ver 11- Fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad;
Fortalecidos con todo su poder en Ef 1:19
Cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza,
2da Tim 1:7  Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.

En 2da Cor 13: 3-4 pues buscáis una prueba de que habla Cristo en mí, el cual no es débil para con vosotros, sino que es poderoso en vosotros. 4 Porque aunque fue crucificado en debilidad, vive por el poder de Dios. Pues también nosotros somos débiles en él, pero viviremos con él por el poder de Dios para con vosotros.
Y de qué forma ha de ser… dice que Conforme a la potencia de su gloria,
Vemos que la Biblia dice en Ef 3:16 para que os de, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por Su Espíritu.

Por último, el apóstol Pablo en su carta a los efesios nos recuerda las herramientas que tenemos los creyentes para pelear la batalla que sin duda lucharemos en nuestra vida de cristianos, en Efesios 6: 10-18 se nos describen como las partes una armadura de guerra para que podamos pelear la buena batalla de la fe,
6:10 Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. 
6:11 Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. 
6:12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. 
6:13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. 
6:14 Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia,
6:15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.
6:16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. 
6:17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; 
6:18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos; 

De donde queremos resaltar el último versículo, en el que el apóstol nos insta a orar sin cesar, con una oración suplicante, guiada por el Espíritu, en consonancia con lo que Dios se agrada en nosotros, no descuidando nada, siendo diligentes, estando alertas, es decir, velando porque los tiempos son duros y nuestra lucha es contra huestes de maldad que están prestas a engañarnos, acusarnos, tentarnos y en fin, alejarnos de la vida agradable a Jesucristo nuestro Señor.

Y continuando con el ver 12  sobre los motivos de la oración de Pablo por los colosenses, Ver 12-  Con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz;

Este gozo no se refiere exclusivamente a los momentos de felicidad y prosperidad, se refiere principalmente a aquel gozo que proviene del conocimiento y la certeza de que todo obrará para bien.
Rom 8:28 y sabemos que a los que aman al Señor todas las cosas le ayudan a bien; esto es, lo que conforme a sus propósitos son llamados.
La adversidad es lo que purifica la iglesia de Dios, lo que produce crecimiento en nuestras vidas, es lo que prueba nuestra fé y disciplina nuestra conducta y ocurre en nuestras vidas, como dice en  Ef 2: 7 para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad, para con nosotros en Cristo Jesús
Con una Hermosa promesa que tenemos en Jud 1: 24  Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría.



domingo, 25 de diciembre de 2011

LA NAVIDAD Y LOS CREYENTES


LA NAVIDAD Y LOS CREYENTES

La gran mayoría del mundo occidental celebra anualmente la fiesta de la Navidad, rodeada  de esplendor y misticismo, lo que podemos caracterizar como una fiesta pagano-religiosa.  El sentido real de esa celebración, se ha ido perdiendo así como el significado primario de estas fiestas, de manera que se han olvidando los orígenes de un nacimiento tan trascendental y hoy como ayer, las actividades paganas han ahogado el verdadero espíritu y significado de la Navidad. (Luc. 2:15-20). Navidad es una palabra que viene del latín nativitatem y que significa natividad o nacimiento,  de la que se hizo un apócope  y se adoptó “Navidad”. 

Fue el obispo Liberio, de Roma, en el año 354 d.C. quien ordenó que el 25 de diciembre se celebrara como el día del nacimiento de Cristo, la Biblia no dice nada sobre la fecha en que Jesús nació, pero este hombre no sólo inventó la fecha, sino que nos obligó a celebrarla.  La realidad es que ese día ya era guardado por la Roma pagana,  el 25 de diciembre correspondía a  la antigua "fiesta del solsticio de invierno", la fiesta de saturno o "Saturnalia" que viene de la tradición babilónica y que recordaba a Mitra, el día del nacimiento del dios sol.

Se decía que Mitra, Baco, Adonis, Orus, Osiris, Júpiter, Hércules y Tamuz, el hijo de Nimrod, habían nacido en la misma época de invierno que hoy se conoce como Navidad.

En Babilonia, esta fiesta dedicada a Saturno se caracterizaba por gran libertinaje y borracheras, muy parecidas a las celebraciones navideñas del siglo presente.  Tenía también dos detalles típicos, primero que se usaban árboles de pino, por doquier, para representar el calor del nuevo nacimiento del dios sol, en forma de fuego, lo que se refería al dios sol Nimrod (tronco seco), que reencarnaba en Tamuz (árbol verde), cuando su madre Semíramis  le alumbraba en esa noche. Nimrod  llegó a ser el primer hombre
poderoso en la tierra (Génesis 10:8).

Debemos resaltar que la Biblia no admite que se dé culto, ni a Dios ni a nadie al pie de árboles. En la ley mosaica esta escrito: “Destruiréis enteramente todos los lugares donde las naciones que vosotros heredasteis sirvieron a sus dioses, sobre los montes altos y sobre los collados, y debajo de todo árbol frondoso...” (Deuteronomio 12:2) “¿Me postraré delante de un tronco de árbol?” (Isaías 44:19).
 El árbol de navidad al que se atribuye un origen germano, ya era símbolo y elemento de culto en la antigüedad.

El hombre no ha podido ocultar la realidad de las profecías. Lo que había sido profetizado por Miqueas, hace ya 28 siglos: “He aquí Dios sale de su lugar, y descenderá y hollará las alturas de la tierra. Y se derretirán los montes debajo de Él, y los valles se hendirán como la cera delante del fuego, como las aguas que corren por un precipicio. Todo esto, por la rebelión y los pecados del hombre...” (Miqueas 1:3-5).
 Y la Palabra fue cumplida hace más de 20 siglos, de modo que el apóstol Juan testifica: “Y aquél Verbo fue hecho carne y habitó entre nosotros y vimos su gloria, gloria como la del Unigénito del Padre, lleno de gracia y verdad” (Juan 1:14).   Juan dio testimonio de Él, y así como había sido escrito, ocurre para la gloria de Dios.
El profeta Isaías, dijo cómo habría de ocurrir: “He aquí que la virgen concebirá  y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel” (Isaías 7:14)... Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro y se llamará su Nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz” (Isaías 9:6). Y esa profecía fue cumplida.. Mateo relata: “Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: He aquí una virgen concebirá y dará a luz un hijo y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros” (Mateo 1:22-23). “Y dio a luz a su hijo primogénito y le puso por nombre Jesús” (Mateo 1:25).



Tenemos también la revelación hecha por el ángel del Señor, cuando le anuncia a José las palabras siguientes:

“Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús, porque ÉL SALVARÁ A SU PUEBLO DE SUS PECADOS” (Mateo 1:21).

Ese es el real y verdadero sentido de la Navidad o nacimiento de Jesús; la razón de la venida del Señor hecho carne, en Jesús. 
Jesús vino a morir por ti y por mí para darnos la seguridad de que si creemos en El y en su palabra tendríamos la felicidad y la alegría verdadera. Navidad debería ser felicidad y gozo si es que tienes a Cristo en tu corazón.

ÉL SALVARÁ A SU PUEBLO DE SUS PECADOS Pocos conocen el significado profundo de este advenimiento divino en carne, pero lo celebran. Y así comenzó una costumbre que con el tiempo se hizo ley, se convirtió en tradición: El mundo celebra el Nacimiento del Hijo de Dios. Entendiendo esta verdad, no creo que resulte absurdo pensar que el enemigo de Dios y del hombre, satanás, ha usado esta fecha y esta celebración para distraer al hombre del significado profundo que tiene el Nacimiento de Dios, hecho carne. 


El Evangelio dice 
“Porque ya nació en la ciudad de David,….Se refiere a Belen, como había sido profetizado por el profeta Miqueas. Los magos vinieron del oriente, conocedores de las profecías que escucharon de los judíos dispersos en Babilonia.  Roma adoptó el intercambio de regalos en recuerdo de los dones que los magos presentaron a Jesús.

Sólo que los magos no hicieron esos regalos con motivo del nacimiento, pues para esas fechas José, María y el Niño ya vivían en "su casa", como lo asienta Mateo, el evangelista, en Mateo 2:11 “Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María y postrándose lo adoraron, y abriendo sus tesoros le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra”.

Lc 2: 11 nos dice , …Que os ha nacido hoy, en la ciudad de David Un Salvador, que es Cristo, el Señor”. Y agrega el Apocalipsis: “Ahora ha venido la salvación, el poder, el reino de nuestro Dios y la autoridad de su Cristo... ¡Aleluya! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor” (Apocalipsis 12:10, 19:1)

 El mundo da una imagen apocalíptica: “Ha caído, ha caído la gran Babilonia y se ha hecho habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo y albergue de toda ave inmunda y aborrecible, porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación y los reyes de la tierra han fornicado con ella y los mercaderes de la tierra se han enriquecido de la potencia de sus deleites” (Apocalipsis 18:2-3).


No hay un solo vestigio en la Biblia, de que la iglesia primitiva celebrara la navidad, porque Jesús no ordena celebrar el aniversario de su nacimiento, sino celebrar su muerte con veneración, como lo vemos en los Hechos de los Apóstoles, ellos se reunían a celebrar la cena del Señor, en obediencia al mandato “Haced esto en memoria de MI” (Lucas 22:19)... “Así pues, todas las veces que comiereis este pan y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que Él venga”, así lo dejó escrito el apóstol Pablo en la primera carta a los corintios (1ª Corintios 11:26).

 Y el motivo es  anunciar su muerte y su resurrección, no su nacimiento. El rey Salomón en Eclesiastés afirma: “Mejor es el día de la muerte, que el día del nacimiento” (Eclesiastés 7:1).

 
Lucas 2:8 Habla del ángel que hizo el anuncio a los pastores "que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño", pero bien sabemos que, aún hasta el día de hoy, en Israel los pastores no hacen esto en invierno, sino en otoño, donde todavía encuentran algo de pastos para las ovejas.



La Biblia da suficientes datos para determinar el nacimiento del precursor de Jesús: Juan el bautista, y todos sabemos que Juan nació seis meses antes que el Señor.

 Cuando vemos al sacerdote Zacarías, padre de Juan el Bautista, ministrando en el templo, como sucesor del sacerdocio de Aarón, el Evangelio cuenta: Hubo en los días de Herodes, rey de Judea, un sacerdote llamado Zacarías, de LA CLASE DE ABÍAS...” (Lucas 1:5). 

La Escritura dice que María concibe a Jesús, seis meses después de la concepción de Juan. El  calendario hebreo sugiere que María concibe a Jesús, en el mes de Tebet. “Y he aquí tu parienta Elisabet, ella también ha concebido hijo de su vejez, y éste es el sexto mes para ella...” (Lucas 1:36).
Si Jesús es concebido seis meses después que Juan, contando nueve meses de gestación, el calendario nos dice que Jesús nació en el mes hebreo de Tisri o Etanim, o sea al final de septiembre o primera quincena de octubre. O sea que el Señor no nació en invierno, sino en otoño.



Actualmente la tradición supera a la Verdad revelada por Dios en su Palabra, Jehová comentó: Este pueblo de labios me honra, más su corazón está lejos de MÍ, pues en vano me honran enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres” (Mateo 15:8-9).



 Un cristiano de este tiempo no puede abominar o rechazar la Navidad, bajo pretexto de ser herencia pagana, porque no se puede tapar el sol con un dedo, ni puede, como el avestruz, ocultar la cabeza de la realidad que se vive. Lo que sí puede hacer el cristiano, es aprovechar la ocasión de la celebración mundana, para llevar al incrédulo o al religioso neófito al verdadero significado y al entendimiento de la Navidad.  Muchas iglesias cierran sus puertas y actividades semanales para darle descanso y vacaciones a sus miembros en estos días. ¡ Que tan gran oportunidad se están perdiendo los cristianos de expresar y exaltar el mensaje del nacimiento de Cristo hoy !

El cristiano no abomina la Navidad, abomina las expresiones mundanas.  Hace falta al cristiano que se precia de conocer la Palabra de Dios y de obedecerla, celebrar una Navidad que guíe al incrédulo a entender su más íntimo significado. Lo que un cristiano celebra con la Navidad es LA SALVACIÓN por Jesucristo en cada momento del año, porque un cristiano, es parte de "su pueblo" y "ya somos salvos de pecados”

 Aprovechemos los cristianos estos días para anunciar, sin condenar a nadie, una Navidad o nacimiento, pero no el de Jesús, sino el nacimiento espiritual de cada creyente. Anunciemos la "Navidad del creyente".

La familia se reúne con algunos propósitos, el cristiano debe aprovechar la reunión familiar y de los vecinos y amigos para anunciar el nacimiento de Aquel que ahora tiene 33 años, que es adulto y que murió en la cruz por nosotros (y es el único que intercede por el hombre). Que este diciembre podamos decir a muchos "Feliz nacimiento espiritual" (Feliz Navidad), porque Jesús está vivo y pendiente del arrepentimiento de muchas personas, para salvarles de sus pecados...



Con el mes de diciembre, llega una época en que al ser humano se le despierta una especie de ternura reprimida.  El hombre fue creado para amar, busca el escape hacia la demostración afectuosa. En esta época se hace a un lado el trabajo y el egoísmo y se hace una pausa,  en el afán cotidiano, para dar amor al prójimo, abrazarle y desearle algo bueno, enviarle felicitaciones, hacer regalos y olvidar diferencias. 

Es un momento para predicar, aprovechar la blandura de los corazones, la humedad de esa tierra, que la hace fértil para que germine la Palabra que se ha sembrado. Y celebremos cristianamente y en comunión con los santos, porque, como ha dicho nuestro pastor ¡Claro que tenemos razones para celebrar!  (Lucas 2:10-11)  10 Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: 11 que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor.  Amén



Catalina González Pons
Diciembre 2011

domingo, 27 de noviembre de 2011

FOTOS REUNION DE LIDIAS. NOV. 2012




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Condiciones para una oración que prevalece


24 de septiembre 2009


Condiciones para una oración que prevalece


No deja de ser un hecho que la mayoría de los cristianos tenemos ideas muy  vagas de cuales son las condiciones que hacen prevalecer su oración  ante el Señor.
Y no es exagerado decir que para el cristiano, todo crecimiento verdadero en la vida espiritual, la comunión cotidiana con Dios, depende de la práctica de la oración privada.

Acaso sabemos por qué los  cristianos nos sentimos tantas veces derrotados? Por qué son tan pocos los que llegan a los pies del Señor por nuestra predicación?, o por qué  nuestras iglesias no están  tan vivas y ardientes como lo estaban  las iglesias primitivas? O por qué no gozamos de aquel primer amor que inundó nuestras vidas de nuevos creyentes?
La respuesta es porque oramos poco.

Podemos estar seguros de que el secreto de todos nuestros “supuestos fracasos” está en el fallo de la oración personal.

Quizás alguna vez hemos meditado en cuánto debería maravillarse y admirarse el Señor de que entre nosotros, que de veras le amamos  y adoramos, haya tan  pocos que invoquen su  nombre y que se despierten para apoyarse en Dios??. Isaías 64:7

La inmensa mayoría de los cristianos no tenemos idea del significado de “la suplicación” y muchas iglesias de Cristo no celebran cultos de oración considerando que no hay necesidad de tales reuniones.

Nuestra iglesia celebra cultos de oración pero cuando esto se hace, la iglesia está generalmente vacía y el tiempo que dedicamos a la oración es tan poco que no podemos llegar a una verdadera adoración. Realmente disfrutamos nosotros de una reunión de oración? Se trata de un gozo o simplemente de cumplir con un deber?

Cuando miro a mi propio pasado y veo cuantos períodos de mi propia vida han transcurrido sin oración, no puede haber intención de crítica ni de señalamientos particulares en estas palabras, toda intención de juzgar se desvanece en mi mente y mis labios cuando miro nuestra la propia infidelidad y poca perseverancia en la oración.

Planteo esta pregunta con toda franqueza…..creemos realmente en el poder
de la oración? Creemos que la oración tiene poder para hacer mover la
mano que hace mover al mundo? Que es lo que hace mover la mano de
Dios?
Creemos que son válidas todavía las promesas de Dios respecto a la oración?
Tal vez proceda ahora una introspección que nos permita hallar respuesta a todas estas preguntas.


ENTRE LOS CUATRO EVANGELIOS

LOS TRES SINOPTICOS Y EL DE JUAN



Los cuatro Evangelios son los libros biográficos de Jesús. Relatan mucho de los mismos acontecimientos por lo que se llaman sinópticos= a ver juntos. La mitad del E. de Mateo está en los E. Sinópticos, al igual que la mitad del E. de Lucas.
El 90% del E. de Marcos se encuentra  en los otros dos sinópticos.
Natanael probablemente el apóstol Bartolome.

EL EVANGELIO DE JUAN


Escrito en Éfeso, hacia el año 100 después de Cristo. En respuesta al surgimiento de muchas herejías, como las de los gnósticos. Juan recibió presiones de sus discípulos que le pedían que escribiera. Se cree que lo dictaba a sus acompañantes. Menos del 10% de este Evangelio está contenido en los otros tres Evangelios. Conserva discursos enteros y es considerado el más precioso del Nuevo Testamento.
Juan tiene la mirada más penetrante de los autores del NT.







HECHOS AÑO  PREPARACIÓN EN JUAN Y NO EN OTROS EVANGELIOS
Encuentro Juan-Jesús



Juan 1:35
Recl. Discípulos
Mt.4:18-22


Juan 1:35-37
Bodas de Cana



Juan 2:1-2
Purificación Templo
Mt 21:12
Mc 11:15
Lc 19:45-48
Juan 2:13-22
Jesús y Nicodemo
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Juan 3:1
Jesús y la samaritana
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Juan 4:1
Jesús sana hijo guarda



Juan 4:43

























 sinopticos relatan los comienzos del año de Preparación (Bautismo y tentación) Juan se ocupa de los hechos ocurridos después